Esment ha puesto en marcha una nueva actividad de entrega de paquetes a domicilio para favorecer la inserción laboral de las personas. Lo realiza un equipo formado por siete personas que, tras un periodo de formación, se han convertido en repartidores profesionales a domicilio. Lo hacen a pie, transportando los paquetes en carritos fáciles de manejar y que les permiten llegar hasta la puerta del domicilio de entrega de una forma responsable y libre de CO2.
La iniciativa nace de la colaboración con la empresa de reparto consciente Koiki que, junto con Amazon, han puesto en marcha esta actividad de micromovilidad pionera en todo el Estado.
La actividad se lleva a cavo desde la sede de Bosc, donde los repartidores se reúnen a las 10 de la mañana, de lunes a viernes, para organizar las entregas. Las distribuyen en función de las tres rutas que tienen asignadas y que realizan de forma individual cada uno de ellos por el centro de Palma. Para los bultos más grandes y pesados, disponen de una furgoneta eléctrica que maneja a diario uno de los repartidores con permiso de circulación. A través de una aplicación, cada uno de ellos hace y registra las entregas asignadas y en caso de no encontrar a nadie en el domicilio, contactan con el destinatario para coordinar la entrega. Disponen de toda la mañana para hacerla pero la mayoría de los repartidores regresa con los carros vacíos a las pocas horas ya que en apenas un mes, se han convertido en uno de los equipos más rápidos y eficientes en micromovilidad.
De momento, la experiencia está siendo muy positiva tanto para las personas que forman parte de esta actividad como para los clientes, que valoran que el reparto sea más cercano y sostenible.