Ya está en el mercado la nueva añada Gallinas & Focas 2020. En esta producción, que se presenta con una nueva etiqueta diseñada por el mismo grupo de personas con necesidades de apoyo que dieron nombre al vino, se ha conseguido potenciar al máximo el carácter frutal y fresco de la uva manto negro, conservando sus matices a hierbas aromáticas caramelo y tostados. La producción de esta añada ha sido muy similar a la del año anterior, con un total de 17.000 botellas, más 90 magnums.
Gallinas & Focas es un vino con un alto contenido humano, resultado de la colaboración de Esment con la Bodega 4 Kilos. La cosecha la realiza de forma manual el equipo de personas vinculadas al Celler, que seleccionan sobre el terreno los mejores ejemplares de racimos y bayas. Una vez en bodega, se prensa y el mosto obtenido se deja fermentar durante 25 días a temperatura controlada. El vino resultante pasa a realizar su crianza de 18 meses, repartida entre barricas de roble Allier (12 meses) y roble francés (6 meses). Finalmente, el vino se embotella y reposa 6 meses más en bodega, donde termina de afinarse, antes de su comercialización.
Precisamente en los próximos días arrancará la campaña de la vendimia 2023 y lo hará con buenas expectativas de calidad, según apunta la responsable del Celler, Lluïsa Buades. La climatología ha favorecido la producción, maduración y calidad de la uva, y no se prevén adelantos ni retrasos inesperados.
